¿Qué ha cambiado en 5 años según los Monitores Mipyme de CELIEM?

Durante los últimos cinco años, los Monitores Mipyme de CELIEM han sido una herramienta clave para entender cómo evoluciona el ecosistema emprendedor y empresarial en Costa Rica y la región. Al comparar los hallazgos más recientes del Monitor Mipyme 2025 con los estudios de años anteriores, se observa una mezcla de avances y desafíos que siguen marcando la agenda de las micro, pequeñas y medianas empresas.

1. La formalidad: avances lentos y nuevas tendencias

El registro tributario se mantiene como el principal instrumento de formalización de las empresas, con una participación superior al 80%. Sin embargo, se observa un incremento en las mipymes registradas como persona física y una disminución de las que utilizan figura jurídica.

Pese a algunos avances, las cargas tributarias y la burocracia siguen siendo limitantes estructurales.

2. Acceso al financiamiento: un reto persistente

El acceso al crédito continúa siendo percibido como poco o nada accesible por el 65% de las empresas, lo que refleja una problemática recurrente en todos los monitores de los últimos cinco años.

Si bien el capital propio sigue siendo la principal fuente de recursos, en este año se nota un mayor uso de tarjetas de crédito y créditos personales. También destaca un cambio: las mipymes ahora se relacionan de manera similar con la banca pública y privada, cuando antes la pública tenía mayor peso. La refundición de deudas aparece como una nueva necesidad financiera.

3. Servicios de desarrollo empresarial: la capacitación como base

La capacitación técnica y empresarial continúa siendo el servicio más utilizado, pero la demanda actual apunta a procesos más sofisticados: innovación, acceso a mercados, información estratégica y encadenamientos productivos.

No obstante, un 50% de las mipymes reportó no haber recibido ningún servicio de desarrollo en el último año, lo que refleja un vacío en el acompañamiento institucional.

4. Innovación y mercados: prioridades emergentes

Si en el pasado las preocupaciones principales giraban alrededor de la gestión interna y la formalización, hoy las mipymes ponen el foco en innovación, diversificación de productos y acceso a nuevos mercados.

El comercio electrónico se consolida como el tercer mecanismo de ventas más relevante, aunque aún no es percibido como una fortaleza: más bien, se identifica como una de las principales debilidades, junto con mercadeo y ventas.

5. Lo que no ha cambiado

A pesar de los esfuerzos normativos y la creación de instrumentos de apoyo, los Monitores muestran que las limitaciones estructurales siguen siendo las mismas: acceso a financiamiento, reducción de trámites y debilidad del apoyo institucional. En palabras del análisis de CELIEM, el ecosistema mipyme parece “estar en una zona de confort, con temor a explorar la zona de aprendizaje”.

Conclusión

En cinco años, las mipymes han logrado avances puntuales en innovación, digitalización y diversificación, pero las barreras tradicionales —financiamiento, burocracia y débil apoyo institucional— persisten. Los Monitores Mipyme de CELIEM dejan claro que el reto no es la falta de recursos o normativa, sino la necesidad de gestión estratégica, visión de futuro y acompañamiento efectivo para que las mipymes puedan aprovechar plenamente las oportunidades que el mercado y la tecnología ofrecen.